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jueves, 27 de mayo de 2010

PAN



El Partido Acción Nacional, conocido por el acrónimo PAN, es el partido político que actualmente ocupa el gobierno en México. Los miembros de este partido se denominan panistas.

El PAN es un partido político de centro-derecha. Así mismo el PAN se auto-denomina "humanista".

Su presidente César Nava Vázquez, y José González Morfín ocupa la Secretaría General. Su estructura se basa en la formación de cuadros políticos y cuenta con un extenso cuerpo normativo que determina su vida institucional.

Fundado en 1939, el PAN fue durante siglo XX, el principal partido opositor en México, situación que cambió al gobernar varios estados desde 1989 y a nivel federal con la integración de un bloque opositor en la LVII Legislatura en 1997 y con el triunfo de Vicente Fox Quesada a la Presidencia de la República con la Alianza por el Cambio en el año 2000.

El resultado de la elección federal del 2 de julio de 2006 fue controvertido. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación declaró por unanimidad al candidato Felipe Calderón Hinojosa, presidente electo. Tomó posesión el 1 de diciembre del 2006 en el Congreso de la Unión. El PAN se ubicó como el partido con mayor número de diputados Federales y Senadores.
Para entonces, el PAN contaba con el gobierno local en los estados de Aguascalientes, Baja California, Jalisco, Guanajuato, Morelos, Sonora, Tlaxcala. Además, tiene una importante presencia en los estados de Nuevo León, Querétaro, Zacatecas, Tamaulipas, Coahuila, Veracruz, Campeche, Chihuahua y Michoacán.
DIRIGENTE: CESAR NAVA

PV



El Partido Verde Ecologista de México (PVEM o PVE) es un partido político mexicano de extrema derecha.


Es considerado el cuarto partido político en México, según el número de representantes que tiene en el congreso de este país. Varias de estas posiciones las ha obtenido gracias a sus alianzas con otros partidos.


En las elecciones federales del año 2000 formó, junto con el Partido Acción Nacional (PAN), la Alianza por el Cambio, la cual resultó vencedora de los comicios y consiguió la presidencia de la República para el candidato del PAN, Vicente Fox Quesada. A partir del año 2003 ha hecho alianzas principalmente con el Partido Revolucionario Institucional.

PRI



El Partido Revolucionario Institucional (PRI) es uno de los principales partidos políticos mexicanos y mantuvo el poder sobre México entre 1929 y 1997, cuando perdió la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados. Desde 1929 los presidentes de México provenían de este partido político, hasta que en las elecciones federales del año 2000 ganó por primera vez el PAN.

Actualmente la presidenta nacional del partido es Beatriz Paredes Rangel, y la Secretaría General la ocupa Jesús Murillo Karam.

Hasta 1989, el PRI gobernaba en las 32 entidades federativas; ahora gobierna en 19 estados de la República, a saber: Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Durango, Sinaloa, Nayarit, San Luis Potosí, Veracruz, Puebla, Hidalgo, Querétaro, Colima, Estado de México, Oaxaca, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.

A raíz de la elección federal de 5 de julio de 2009, el PRI ganó la mayoría en la Cámara de Diputados, y se colocó como la primera fuerza política del país. Obtuvo 12,821,504 votos y 184 diputados (de 300) de mayoría relativa, con un total de 237 si a éstos se suman los de representación proporcional. En el Senado, es la segunda fuerza política.

En los últimos años ha recuperado numerosos e importantes municipios, y ha llegado a gobernar al 60 por ciento de los mexicanos. En las elecciones intermedias federales más recientes el PRI volvió a situarse como la primera fuerza política del país, al ganar la mayoría en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
GIRIGENTE: JESUS MARILLO Y BEATRIS PAREDES

PT


El Partido del Trabajo (PT) es un partido político mexicano fundado el 8 de diciembre de 1990. En la legislatura actual, el PT cuenta con 13 curules en la Cámara de Diputados, y 5 en el Senado. Es un partido de izquierda y cuenta con el apoyo de diversos sectores populares. Su dirigencia es colectiva, es actualmente miembro del Frente Amplio Progresista

DIRIGENTE:FRANCISCO HERNANDEZ JUAREZ

PRD


El Partido de la Revolución Democrática o PRD es un partido político mexicano, fundado el 5 de mayo de 1989, con una ideología política de izquierda, es considerada la tercera fuerza política de ese país. Los militantes de este partido se conocen popularmente como perredistas. Partido miembro del Frente Amplio Progresista.
En 2007, los políticos afiliados al PRD gobiernan en los estados de Baja California Sur, Chiapas, Zacatecas, Michoacán, Guerrero y la capital de la República, el Distrito Federal. También ha encabezado el gobierno de Tlaxcala. En 2006 oficialmente pierden las elecciones a la presidencia de México, a la cual el partido reclama que el triunfo fue impedido por un fraude electoral.
DIRIGENTE:JESUS ORTEGA

"PRD"


El Partido de la Revolución Democrática o PRD es un partido político mexicano, fundado el 5 de mayo de 1989, con una ideología política de izquierda, es considerada la tercera fuerza política de ese país. Los militantes de este partido se conocen popularmente como perredistas. Partido miembro del Frente Amplio Progresista.

En 2007, los políticos afiliados al PRD gobiernan en los estados de Baja California Sur, Chiapas, Zacatecas, Michoacán, Guerrero y la capital de la República, el Distrito Federal. También ha encabezado el gobierno de Tlaxcala. En 2006 oficialmente pierden las elecciones a la presidencia de México, a la cual el partido reclama que el triunfo fue impedido por un fraude electoral.

El partido cuenta con una presencia en algunas zonas del sur del país. Además de los estados que gobierna, tiene fuerza en Tabasco, Morelos, Tlaxcala, el Estado de México, Veracruz, Quintana Roo, Oaxaca , Hidalgo y Veracruz. Es especialmente débil en el norte del país y en algunos estados de esa región prácticamente no tiene presencia, salvo tres estados: Nayarit, Zacatecas y Baja California Sur.

El PRD nace como una coalición de diversos partidos políticos de izquierda, antes de ser bautizado como PRD, su origen es el Partido Mexicano Socialista (PMS) que nace de la fusión de 6 fuerzas políticas de Izquierda a nivel Nacional: Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), Partido Socialista Unificado de México (PSUM), Partido Popular Revolucionario (PPR), Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), Unión de la Izquierda Comunista (UIC) y el MAUS; más adelante se unen a la fusión una parte de la militancia del Partido Socialista de los Trabajadores (PST). Su principal líder fue el Ingeniero Heberto Castillo Martínez

El naciente Partido Mexicano Socialista cede su registro en alianza con ex miembros del PRI y organizaciones civiles que se opusieron al partido gobernante y pugnaron por elecciones democráticas, y nace el Partido de la Revolución Democrática.

Entre los ideales que le dieron origen se cuentan el respeto a la voluntad ciudadana expresada en las urnas, la libertad de expresión, la defensa de los derechos civiles y el combate a la corrupción.

Actualmente, el PRD se dice partidario de una economía de libre mercado, pero defiende la participación del estado en los sectores que considera estratégicos, principalmente recursos energéticos y comunicaciones. Asimismo, le da al estado un papel preponderante en lo que se refiere a política social: se pronuncia por una educación laica y gratuita en todos los niveles y que cumpla con la demanda nacional, por la ayuda económica a los sectores más desfavorecidos (ancianos, estudiantes y discapacitados pobres), y por el otorgamiento de subsidios a productos de primera necesidad. Se ha pronunciado también por un desarrollo del sector agrícola que satisfaga las demandas de los campesinos.

Algunos miembros del partido han adoptado recientemente nuevas posturas ideológicas, como son la defensa del aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo y la eutanasia.


Fundación

El PRD se fundó en la Ciudad de México, el 5 de mayo de 1989 y fue fundado por los expriistas Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Porfirio Muñoz Ledo, e Ifigenia Martínez entre otros y miembros históricos de la Izquierda como Heberto Castillo, Gilberto Rincón Gallardo, entre muchos otros políticos de la izquierda mexicana.

En el PRD confluyen dos corrientes de la izquierda histórica mexicana. Por un lado, una corriente que proviene de la tradicional "familia revolucionaria", representada por la izquierda del PRI, que gobernó en México de forma ininterrumpida de 1929 al año 2000. La otra corriente que confluyó en el PRD es la izquierda socialista mexicana, cuyos orígenes están en el Partido Comunista Mexicano.

cuales son los diferentes partidos politicos

Los Partidos Políticos de México se dividen según el espectro político tradicional formando tres grupos: Derecha, Centro e Izquierda, existiendo en cada uno de estos apartados uno de los tres grandes partidos, aunque algunos han fluctuado entre la derecha y el centro según la etapa histórica de la que estemos hablando. También los podemos dividir según su historia y su importancia política en tres sectores, que serían los tres grandes partidos históricos, que se disputan las preferencias electorales y que los tres ocupan gubernaturas estatales. Los partidos medianos, de más reciente formación, y con presencia en el Congreso de la Unión y en gobiernos municipales, y finalmente los partidos pequeños de reciente formación.


Representantes

Artículo principal: Cámara de Diputados (México)
Fundación Fundador Partido Político

*1929
Plutarco Elías Calles
Partido Revolucionario Institucional

*1939
Manuel Gómez Morín
Partido Acción Nacional

*1989
Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano
Partido de la Revolución Democrática

*1986
Jorge González Torres
Partido Verde Ecologista de Mexico

*1990
Alberto Anaya
Partido del Trabajo

*1999
Dante Delgado Rannauro
Partido Convergencia

*2005
Miguel Ángel Jiménez Godínez
Partido Nueva Alianza

que es un partido politico

Un partido político es el encargado de reclutar candidatos para ocupar los cargos gubernamentales y los cargos legislativos. Para eso, movilizan el apoyo electoral. También organizan la labor legislativa, articulan y agregan nuevos intereses y preferencias de los ciudadanos. Es esencial para estructurar el apoyo político a determinados programas, intereses socioeconómicos y valores. Agrega las preferencias de los ciudadanos, forma gobiernos y establece acuerdos políticos en el ámbito legislativo.

Ideas partidarias

Cada partido posee una ideología que le da claridad conceptual. Lo guía en su acción política, esta se compone en:
*Doctrinas: conjunto de creencias que se toman como válidas.
*Teorías: sistematización explicativa, comprensiva e interpretativa de la realidad.
*Plataforma: agrupación de los principales problemas sociales, políticos y económicos.
*Programas: aquellos remedios para paliar los problemas.
*Consignas: slogans o lemas característicos del partido.

Índice de centralidad de los partidos políticos
Este índice mide la capacidad de los presidentes y los dirigentes de imponer disciplina en su partidos; cuando un presidente tiene un partido centralizado, es muy probable que pueda lograr imponer su programa legislativo.

La capacidad de los dirigentes o de los candidatos presidenciales es uno de los factores de la centralidad. Cuando los líderes determinan quienes se presentarán como candidatos y su lugar en la lista electoral, los legisladores tienen incentivos para adherirse a la línea del partidos en la legislatura.

El segundo factor son las características del sistema electoral. Así, la centralización es mayor cuando los legisladores son elegidos en distrito único; o en grandes distritos con listas cerradas y bloqueadas. El tercer factor es la simultaneidad de las elecciones presidenciales y legislativas: los partidos son más centralizados y los diregentes más poderosos cuando las elecciones son simultáneas. Los otros factores son: el grado de autonomía de las autoridades subnacionales, el grado de democracia interna en los partidos y la existencia de elecciones primarias.

Funciones de los Partidos políticos
Socialización política y creación de opinión
Armonización de intereses
Formación de elites políticas
Canalización de peticiones de la población hacia los poderes
Reforzamiento y estabilización del sistema político
Ascendentes (cuando fluyen desde la sociedad al Estado):
Estructuración del voto: ordenan la multiplicidad de opciones electorales.
Movilización e integración social: alientan la participación política, la concurrencia a los comicios y la asistencia a actos públicos.
Agregación de demandas: las sistematizan y priorizan. Armonizan intereses sectoriales integrándolos en un programa común.
Fomentan la socialización política: transmiten principios, proyectos e ideas que propician el aprendizaje cívico.
Creación y orientación de la opinión política.
Descendentes (derivan de la interacción con el gobierno):
Reclutamiento, formación y selección de potenciales líderes políticos.
Garantizan la renovación de las autoridades mediante el consenso y la aceptación de las reglas de la competencia.
Diseño, seguimiento y evaluación de políticas públicas.
Control de los representantes.
Reforzamiento y estabilización del sistema político.

Organización partidaria

Robert Michels, desde un enfoque monocausal, plantea que la dimensión del partido político es la variable fundamental que define su organización, dado que incide en:

*La Cohesión interna: en formaciones políticas pequeñas es más fácil un acuerdo en torno a valores y objetivos. Pero si aumentan sus proporciones habrá una mayor heterogeneidad.

*El estilo político: las grandes agrupaciones son más pragmáticas.
La movilización de los afiliados: el tamaño varía en sentido inverso a la participación.

*La burocratización: a medida que crece la organización es más notable la división del trabajo. Se fomentan las desigualdades internas en pos de la eficiencia del partido.
Panebianco considera que no se puede establecer un nexo tan rígido de causalidad. Afirma que los factores que definen el perfil de la organización partidaria y permiten conocer sus expectativas de supervivencia o éxito son:

*Competencia: medida en la que se convierte en un actor indispensable para desempeñar un papel determinado.

*Gestión de las relaciones con el entorno: capacidad de adaptación, aptitud para formular estrategias de negociación, establecer alianzas y conflictos con otras organizaciones.

*Comunicación: control ejercido sobre los canales de información internos y externos.
Reglas formales: es importante conocer quienes tienen facultades para modificar las normas, las posibles desviaciones y el grado en el que se cumplen los estatutos.

*Financiación: es un asunto muy polémico. Existen distintos criterios, algunos afirman que debe ser pública solo durante las campañas electorales para garantizar la participación de todos los partidos. Otros consideran que el Estado tiene que ocuparse de todos los gastos para su mantenimiento y funcionamiento. Esto afectaría su independencia. Quienes se inclinan por la financiación privada sostienen que los costos económicos deben ser solventados por los ciudadanos interesados. Se pueden adoptar medidas negativas de limitación directa (estableciendo un máximo de gastos permitidos) o indirecta (obligarlos a dar publicidad del origen de los recursos y de su finalidad); o medidas positivas de prestación directa (subvención de actividades) o indirecta (ayudas como destinar espacios gratuitos en la televisión pública para los partidos). La contribución puede ser con base en los cargos obtenidos o en función del porcentaje de votos recibidos con independencia de si ha conseguido o no representación. Lo más adecuado es combinar ambos criterios.

*Reclutamiento: definición de los requisitos de admisión, carrera y permanencia.
Composición de los partidos políticos

*Dirigencia: concentra los recursos de poder y representa el centro de la organización. Distribuyen incentivos e interactúan con otros actores claves dentro del sistema. Toman las decisiones principales

*Candidatos: potenciales ocupantes de los cargos públicos electivos, ya sean de carácter ejecutivo o legislativo. Son seleccionados por los demás miembros del partido.

*Burocracia: cuerpo administrativo.

*Técnicos e intelectuales: asesoran permanentemente a los dirigentes, colaboran en la redacción de proyectos y asisten a los candidatos en épocas de campaña electoral.

*Militantes: miembros que participan activamente y de modo constante.

*Afiliados: están inscriptos en el padrón del partido y aportan a su financiación a través de cuotas periódicas, limitan su participación a la elección interna de los candidatos y autoridades.

Además en el exterior del partido pueden encontrarse simpatizantes: se muestran favorables a sus principios pero se mantienen apartados de la organización colaborando con sus votos y opiniones.

Financiamiento

En los tiempos actuales, los recursos monetarios tienen una gran importancia debido a que las campañas son más costosas. Esto es por el mayor uso de la publicidad televisiva, asesores, encuestas de opinión y grupos focales. Sin embargo, la reducción de las cuotas se ha reducido: es por esto que, en la actualidad, los recursos monetarios son una importante herramienta para influir en las autoridades políticas.

En algunos países de Latinoamérica, el financiamiento el Estado contribuye con el financiamiento de los partidos políticos o los apoyan indirectamente. Es común que se exiga ciertos requisitos tales como tener una determinada cantidad de votos o representación parlamentaria para acceder a los recursos; esto puede pesar también en la cantidad de fondos asignados; estos fondos son desembolsados según un calendario. En ciertos casos, se prohíbe las contribuciones privadas de los partidos de determinadas fuentes como también se puede poner un límite a los fondos donados. Algunos países dan facilidades para el acceso de los partidos a los medios de comunicación. Finalmente, es común que existen organismos de control de los procesos electorales así como mecanismos de sanción.


Origen de los partidos políticos

Siempre han existido grupos que difieren acerca del modelo de convivencia y que compiten unos con otros, pero los partidos políticos con una organización y función específica surgen a mediados del siglo XIX como consecuencia del régimen democrático representativo y de la expansión del sufragio. Desde un enfoque institucional Maurice Duverger diferencia:
Partidos de creación interna: nacen en el seno del Parlamento. En un principio se presentaron como facciones que se disputaban el poder, por ej. los Tories (conservadores) y los Whigs (liberales) en Inglaterra. Tenían una connotación negativa, se creía que actuaban en desmedro del bien común persiguiendo intereses egoístas. Pero con el tiempo se torna evidente la imposibilidad de mantener una relación directa entre el pueblo y sus representantes. Para responder a las nuevas demandas sociales se requiere una mayor organización. Pasan de un escenario de inorganicidad a otro crecientemente orgánico.

Partidos de creación externa: surgen a partir de la lucha por la extensión de los derechos políticos entre fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX. Aparecen estrechamente vinculados con grupos que realizaban sus actividades fuera del Parlamento como los sindicatos, entidades religiosas y periódicos. Por ej. el Partido Laborista Británico.

En cambio desde un enfoque sociológico o genético adquieren relevancia ciertas divisiones sociales estructurales acaecidas durante el proceso de formación de los Estados nacionales y de la economía moderna. Se destacan dentro de esta corriente Seymour Lipset y Stein Rokkan , quienes desarrollan la teoría de los cleavages históricos. Se refieren a cuatro fisuras importantes:
Conflicto entre países centrales y periféricos: diversas poblaciones se resisten a las imposiciones lingüísticas, religiosas o políticas de las grandes potencias colonizadoras. Surgimiento de partidos regionales que reivindican la identidad cultural de ciertos grupos.

Problemas en la relación Iglesia y Estado: se disputan el control de la educación y el ordenamiento de las demandas sociales. Formación de partidos confesionales y laicos.

Diferencias entre el campo y la ciudad: emergen partidos urbanos y agrarios.

Tensiones entre capitalistas y trabajadores: la defensa de la propiedad y la libre empresa se
enfrentan a los reclamos de los sindicatos. Nacen los partidos socialistas y los movimientos obreros. Se consolida la distinción entre partidos de derecha y de izquierda.
Tipos de partidos políticos.

Richard Gunther y Larry Diamond se proponen como objetivo reordenar las tipologías más importantes. Lograron diferenciar cinco géneros:

1) Partidos de notables: nacen entre principios y mediados del siglo XIX en Europa, en el marco de regímenes semidemocráticos y de sufragio censitario. Contaban con estructuras organizacionales mínimas, asentadas sobre redes interpersonales en el seno de un ámbito geográfico reducido. Débilmente ideologizados. Basados en la distribución de beneficios particulares a los residentes. Se subdividen en partidos de notables y clientelistas.

2) Partidos de masas: surgen a fines del siglo XIX y comienzos del XX en Europa, se extienden en la actualidad a países asiáticos y africanos. Se caracterizan por tener una organización sólida y una amplia base de afiliados que aportan económicamente al partido. Mantienen lazos fuertes con organizaciones externas como sindicatos, entidades religiosas y medios de comunicación. Se clasifican en: nacionalistas (pluralistas o ultranacionalistas) socialistas (socialdemócratas o leninistas) y religiosos (confesionales o fundamentalistas).

3) Partidos étnicos: se conforman principalmente en la etapa de la descolonización de los años 60’ y 70’. Carecen de una organización demasiado extendida y sofisticada. No tienen estructuras programáticas que incorporen a toda la sociedad. Utilizan generalmente la vía electoral para lograr beneficios particularistas para sus seguidores.

4) Partidos electoralistas: se consolidan en la década del 70’ en el marco de la expansión de los medios de comunicación y el declive del Estado de Bienestar. Son organizacionalmente débiles aunque desarrollan una gran actividad durante las campañas electorales. Se distinguen: los partidos atrapatodo, programáticos y los personalistas.

5) Partidos movimentistas: surgen en el seno de las democracias postindustriales. Adoptan características diversas dependiendo del contexto. Abarca los partidos libertarios de izquierda que se basan en la idea de “consenso negativo”, es decir que abarcan una base de seguidores heterogénea pero sustancialmente posicionada sobre diferentes temas. Por ej. el Partido Verde alemán. También incluye a los de extrema derecha cuyo núcleo ideológico está relacionado con la búsqueda de principios como el orden, la tradición, la identidad y la seguridad. Estos últimos son hostiles con otros partidos, con el Estado y el sistema en general; existen algunos principios xenófobos y racistas. Por ej. el Partido Nacional en Francia.

jueves, 20 de mayo de 2010

obligaciones electorales de los ciudadanos

ARTICULO 5

1. ES DERECHO DE LOS CIUDADANOS MEXICANOS CONSTITUIR PARTIDOS POLITICOS NACIONALES Y AGRUPACIONES POLITICAS Y AFILIARSE A ELLOS INDIVIDUAL Y LIBREMENTE.

2. ES OBLIGACION DE LOS CIUDADANOS MEXICANOS INTEGRAR LAS MESAS DIRECTIVAS DE CASILLA EN LOS TERMINOS DE ESTE CODIGO.

3. ES DERECHO EXCLUSIVO DE LOS CIUDADANOS MEXICANOS PARTICIPAR COMO OBSERVADORES DE LOS ACTOS DE PREPARACION Y DESARROLLO DEL PROCESO ELECTORAL, ASI COMO DE LOS QUE SE LLEVEN A CABO EL DIA DE LA JORNADA ELECTORAL, EN LA FORMA Y TERMINOS EN QUE DETERMINE EL CONSEJO GENERAL DEL INSTITUTO PARA CADA PROCESO ELECTORAL, DE ACUERDO CON LAS BASES SIGUIENTES:

A) PODRAN PARTICIPAR SOLO CUANDO HAYAN OBTENIDO OPORTUNAMENTE SU ACREDITACION ANTE LA AUTORIDAD ELECTORAL;

B) LOS CIUDADANOS QUE PRETENDAN ACTUAR COMO OBSERVADORES DEBERAN SEÑALAR EN EL ESCRITO DE SOLICITUD LOS DATOS DE IDENTIFICACION PERSONAL ANEXANDO FOTOCOPIA DE SU CREDENCIAL PARA VOTAR CON FOTOGRAFIA, Y LA MANIFESTACION EXPRESA DE QUE SE CONDUCIRAN CONFORME A LOS PRINCIPIOS DE IMPARCIALIDAD, OBJETIVIDAD, CERTEZA Y LEGALIDAD Y SIN VINCULOS A PARTIDO U ORGANIZACION POLITICA ALGUNA;

C) LA SOLICITUD DE REGISTRO PARA PARTICIPAR COMO OBSERVADORES ELECTORALES, PODRA PRESENTARSE EN FORMA PERSONAL O A TRAVES DE LA ORGANIZACION A LA QUE PERTENEZCAN, ANTE EL PRESIDENTE DEL CONSEJO LOCAL O DISTRITAL CORRESPONDIENTE A SU DOMICILIO, A PARTIR DEL INICIO DEL PROCESO ELECTORAL Y HASTA EL 31 DE MAYO DEL AÑO DE LA ELECCION. LOS PRESIDENTES DE LOS CONSEJOS LOCALES Y DISTRITALES, SEGUN EL CASO, DARAN CUENTA DE LAS SOLICITUDES A LOS PROPIOS CONSEJOS, PARA SU APROBACION, EN LA SIGUIENTE SESION QUE CELEBREN. LA RESOLUCION QUE SE EMITA DEBERA SER NOTIFICADA A LOS SOLICITANTES. EL CONSEJO GENERAL GARANTIZARA ESTE DERECHO Y RESOLVERA CUALQUIER PLANTEAMIENTO QUE PUDIERA PRESENTARSE POR PARTE DE LOS CIUDADANOS O LAS ORGANIZACIONES INTERESADAS.

D) SOLO SE OTORGARA LA ACREDITACION A QUIEN CUMPLA, ADEMAS DE LOS QUE SEÑALE LA AUTORIDAD ELECTORAL, LOS SIGUIENTES REQUISITOS:
I. SER CIUDADANO MEXICANO EN PLENO GOCE DE SUS DERECHOS CIVILES Y POLITICOS;

II. NO SER, NI HABER SIDO MIEMBRO DE DIRIGENCIAS NACIONALES, ESTATALES O MUNICIPALES DE ORGANIZACION O DE PARTIDO POLITICO ALGUNO EN LOS ULTIMOS TRES AÑOS ANTERIORES A LA ELECCION;

III. NO SER, NI HABER SIDO CANDIDATO A PUESTO DE ELECCION POPULAR EN LOS ULTIMOS TRES AÑOS ANTERIORES A LA ELECCION; Y

IV. ASISTIR A LOS CURSOS DE CAPACITACION, PREPARACION O INFORMACION QUE IMPARTAN EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL O LAS PROPIAS ORGANIZACIONES A LAS QUE PERTENEZCAN LOS OBSERVADORES ELECTORALES BAJO LOS LINEAMIENTOS Y CONTENIDOS QUE DICTEN LAS AUTORIDADES COMPETENTES DEL INSTITUTO, LAS QUE PODRAN SUPERVISAR DICHOS CURSOS. LA FALTA DE SUPERVISION NO IMPUTABLE A LA ORGANIZACION RESPECTIVA NO SERA CAUSA PARA QUE SE NIEGUE LA ACREDITACION.

E) LOS OBSERVADORES SE ABSTENDRAN DE:

I. SUSTITUIR U OBSTACULIZAR A LAS AUTORIDADES ELECTORALES EN EL EJERCICIO DE SUS FUNCIONES, E INTERFERIR EN EL DESARROLLO DE LAS MISMAS;

II. HACER PROSELITISMO DE CUALQUIER TIPO O MANIFESTARSE EN FAVOR DE PARTIDO O CANDIDATO ALGUNO;

III. EXTERNAR CUALQUIER EXPRESION DE OFENSA, DIFAMACION O CALUMNIA EN CONTRA DE LAS INSTITUCIONES, AUTORIDADES ELECTORALES, PARTIDOS POLITICOS O CANDIDATOS; Y

IV. DECLARAR EL TRIUNFO DE PARTIDO POLITICO O CANDIDATO ALGUNO; Y

F) LA OBSERVACION PODRA REALIZARSE EN CUALQUIER AMBITO TERRITORIAL DE LA REPUBLICA MEXICANA;

G) LOS CIUDADANOS ACREDITADOS COMO OBSERVADORES ELECTORALES PODRAN SOLICITAR ANTE LA JUNTA LOCAL QUE CORRESPONDA, LA INFORMACION ELECTORAL QUE REQUIERAN PARA EL MEJOR DESARROLLO DE SUS ACTIVIDADES. DICHA INFORMACION SERA PROPORCIONADA SIEMPRE QUE NO SEA CONFIDENCIAL EN LOS TERMINOS FIJADOS POR LA LEY, Y QUE EXISTAN LAS POSIBILIDADES MATERIALES Y TECNICAS PARA SU ENTREGA;

H) EN LOS CONTENIDOS DE LA CAPACITACION QUE LAS JUNTAS DISTRITALES EJECUTIVAS IMPARTAN A LOS FUNCIONARIOS DE LAS MESAS DIRECTIVAS DE CASILLA, DEBE PREVERSE LA EXPLICACION RELATIVA A LA PRESENCIA DE LOS OBSERVADORES ELECTORALES, ASI COMO LOS DERECHOS Y OBLIGACIONES INHERENTES A SU ACTUACION;
I

) LOS OBSERVADORES ELECTORALES PODRAN PRESENTARSE EL DIA DE LA JORNADA ELECTORAL CON SUS ACREDITACIONES Y GAFETES EN UNA O VARIAS CASILLAS, ASI COMO EN EL LOCAL DEL CONSEJO DISTRITAL CORRESPONDIENTE, PUDIENDO

OBSERVAR LOS SIGUIENTES ACTOS:

I. INSTALACION DE LA CASILLA;

II. DESARROLLO DE LA VOTACION;

III.ESCRUTINIO Y COMPUTO DE LA VOTACION EN LA CASILLA;

IV. FIJACION DE RESULTADOS DE LA VOTACION EN EL EXTERIOR DE LA CASILLA;

V. CLAUSURA DE LA CASILLA;

VI.LECTURA EN VOZ ALTA DE LOS RESULTADOS EN EL CONSEJO DISTRITAL;

VII. RECEPCION DE ESCRITOS DE INCIDENCIAS Y PROTESTA; Y

J) LOS OBSERVADORES PODRAN PRESENTAR, ANTE LA AUTORIDAD ELECTORAL, INFORME DE SUS ACTIVIDADES EN LOS TERMINOS Y TIEMPOS QUE PARA TAL EFECTO DETERMINE EL CONSEJO GENERAL. EN NINGUN CASO LOS INFORMES, JUICIOS, OPINIONES O CONCLUSIONES DE LOS OBSERVADORES TENDRAN EFECTOS JURIDICOS SOBRE EL PROCESO ELECTORAL Y SUS RESULTADOS.

4. LAS ORGANIZACIONES A LAS QUE PERTENEZCAN LOS OBSERVADORES ELECTORALES, A MAS TARDAR VEINTE DIAS ANTES AL DE LA JORNADA ELECTORAL, DEBERAN DECLARAR EL ORIGEN, MONTO Y APLICACION DEL FINANCIAMIENTO QUE OBTENGAN PARA EL DESARROLLO DE SUS ACTIVIDADES RELACIONADAS DIRECTAMENTE CON LA OBSERVACION ELECTORAL QUE REALICEN, MEDIANTE INFORME QUE PRESENTEN AL CONSEJO GENERAL DEL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL, CONFORME A LOS LINEAMIENTOS Y BASES TECNICAS A QUE SE REFIERE EL PARRAFO 2 DEL ARTICULO 49-B DE ESTE CODIGO.

DERECHOS POLITICOS ELECTORALES DE LOS CIUDADANOS

La ciudadanía es un tema muy amplio, el cual puede apreciarse desde diferentes ópticas. En esta ocasión lo enfocaremos hacia la participación de los jóvenes en el ejercicio de los derechos electorales, mismos que se encuentran señalados dentro de los derechos políticos de los ciudadanos, establecidos en nuestra Carta Magna.

***el artículo 34 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que son ciudadanos de la república los varones y las mujeres que, teniendo la calidad de mexicanos, reúnan, además, los siguientes requisitos:
1.- Haber cumplido 18 años
2.- Tener un modo honesto de vivir.

***en el artículo 35 de la Constitución Federal se establece como prerrogativas o derechos electorales del ciudadano las siguientes:
1. Votar en las elecciones populares
2. Poder ser votado para todos los cargos de elección popular y nombrado para cualquier otro empleo o comisión, teniendo las calidades que establezca la ley
3. Asociarse individual y libremente para tomar parte pacífica en los asuntos políticos del país.

***Progresivamente el voto en un principio restringido, se fue ampliando hasta abarcar grandes grupos sociales, en la actualidad el voto es la base de la democracia representativa, y es que cuando el ciudadano vota, afirma y fortalece la democracia.

Para ello al voto se le atribuyen las siguientes características: universal, porque es un derecho de todos los ciudadanos; libre, porque cada ciudadano lo emite sin presiones de ningún tipo; secreto, porque sólo quien lo emite sabe a quién favorece, y directo porque lo hacemos de manera personal y no a través de otro.

Pero la simple actividad de cruzar una papeleta y depositar esa decisión en una urna es un acto cuya ejecución actualmente conlleva el respeto a los principios de imparcialidad, certeza, legalidad y objetividad; a través de la implementación de medidas que transparentan y aseguran el respeto al voto ciudadano, urnas transparentes, tinta indeleble, lista nominal con fotografía, funcionarios de casilla elegidos mediante sorteo, boletas electorales infalsificables y todo un conjunto de normas que determinan con claridad y precisión las actividades de un proceso electoral.

El voto en sus dos perspectivas es sin lugar a dudas una de las conquistas más importantes alcanzadas a través de la historia, ya que por medio de él, los ciudadanos sin distinción de raza, sexo, religión, situación económica, nivel cultural, intervienen con sus decisiones en la vida pública del país.

Frente a estos derechos encontramos las obligaciones que son todas aquellas actividades, que el ciudadano está obligado a realizar, dentro de éstas.

***el artículo 36 de la Constitución Política del país establece como obligaciones del ciudadano de la república: 1
.- Votar en las elecciones populares en los términos que señale la ley
2.- Desempeñar los cargos de elección popular de la Federación o de los Estados
3.- Desempeñar los cargos concejiles del Municipio donde resida, las funciones electorales.

DERECHOS POLITICOS ELECTORALES DE LOS CIUDADANOS

La ciudadanía es un tema muy amplio, el cual puede apreciarse desde diferentes ópticas. En esta ocasión lo enfocaremos hacia la participación de los jóvenes en el ejercicio de los derechos electorales, mismos que se encuentran señalados dentro de los derechos políticos de los ciudadanos, establecidos en nuestra Carta Magna.

Así, el artículo 34 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que son ciudadanos de la república los varones y las mujeres que, teniendo la calidad de mexicanos, reúnan, además, los siguientes requisitos: 1.- Haber cumplido 18 años; y 2.- Tener un modo honesto de vivir. Congruente con lo anterior, la Constitución Política del Estado de Veracruz en su artículo 14 señala que son ciudadanos los mexicanos por nacimiento o por naturalización, que tengan 18 años de edad, un modo honesto de vivir y que sean veracruzanos o vecinos en términos de esa Constitución.

Ahora bien, en el artículo 35 de la Constitución Federal se establece como prerrogativas o derechos electorales del ciudadano las siguientes: 1. Votar en las elecciones populares; 2. Poder ser votado para todos los cargos de elección popular y nombrado para cualquier otro empleo o comisión, teniendo las calidades que establezca la ley; 3. Asociarse individual y libremente para tomar parte pacífica en los asuntos políticos del país.

Concordante en lo general, el artículo 15 de la Constitución Local, además de contemplar los derechos políticos que enmarca la Constitución Federal, se destaca por señalar además los siguientes derechos ciudadanos: I. Participar en los procesos de plebiscito, referendo e iniciativa popular; y, II. Estar informado de las actividades que lleven a cabo sus representantes políticos.

Sin duda dos grandes avances que han hecho de las reformas constitucionales iniciadas por el gobernador del Estado Miguel Alemán Velazco, un modelo para otros estados del país.

Aterrizando estas disposiciones y sus alcances hacía nuestro tema, podemos concluir en dos puntos fundamentales; primero, la ciudadanía se adquiere a los dieciocho años en nuestro país, como en toda América Latina, con excepción de Nicaragua en donde se adquiere a los dieciséis años; y segundo, que los derechos electorales que se desprenden de lo apuntado por las
Constituciones políticas del país y de nuestra entidad federativa son votar y ser votado y de afiliación libre e individual a los partidos políticos. Por otro lado, ser ciudadano implica además de hacer valer nuestro derecho a decidir, participar en una sociedad democrática, disfrutar la libertades de ejercer derechos y cumplir obligaciones, conservar equilibrios, respetar la opinión distinta, privilegiar el diálogo y lograr consensos, todo esto es parte de la actividad del ciudadano moderno, actuante y participante, objeto y sujeto de derecho.

Este es el marco legal, pero esto no siempre ha sido así, y es que para llegar a consolidar estos derechos en la historia, se ha recorrido un largo camino. Así el voto existe desde la Grecia antigua, donde los ciudadanos votaban para decidir sobre la vida de su ciudad, pero hace tan sólo cuarenta y nueve años, la mujer no tenía derecho a votar en nuestro país, mucho menos a ser candidata a un puesto de elección popular, ese derecho se logra durante el sexenio de un ilustre veracruzano, el licenciado Adolfo Ruiz Cortines, y así la mujer acude por primera vez a las urnas para decidir con su voto el futuro de esta nación.

Progresivamente el voto en un principio restringido, se fue ampliando hasta abarcar grandes grupos sociales, en la actualidad el voto es la base de la democracia representativa, y es que cuando el ciudadano vota, afirma y fortalece la democracia. Para ello al voto se le atribuyen las siguientes características: universal, porque es un derecho de todos los ciudadanos; libre, porque cada ciudadano lo emite sin presiones de ningún tipo; secreto, porque sólo quien lo emite sabe a quién favorece, y directo porque lo hacemos de manera personal y no a través de otro. Pero la simple actividad de cruzar una papeleta y depositar esa decisión en una urna es un acto cuya ejecución actualmente conlleva el respeto a los principios de imparcialidad, certeza, legalidad y objetividad; a través de la implementación de medidas que transparentan y aseguran el respeto al voto ciudadano, urnas transparentes, tinta indeleble, lista nominal con fotografía, funcionarios de casilla elegidos mediante sorteo, boletas electorales infalsificables y todo un conjunto de normas que determinan con claridad y precisión las actividades de un proceso electoral.

Para poder ejercer estos derechos, independientemente de lo establecido en las disposiciones constitucionales a que hemos hecho referencia en líneas anteriores, existen otros requisitos formales que cumplir, uno de ellos es estar inscrito en el padrón electoral tal como lo dispone el artículo 36 de la Carta Magna, 16 de la particular del Estado y 3 del Código Electoral del Estado; estar incluidos en el listado nominal, contar con credencial para votar con fotografía, no estar sujetos a proceso penal que merezca pena privativa de libertad, estarla cumpliendo, no estar sujeto a interdicción judicial, no estar privado de sus derechos políticos y no estar prófugo de la justicia desde que se dicte la orden de aprehensión hasta que prescriba la acción penal.

En lo que respecta a poder ser votado, es el derecho que tiene el ciudadano de ser elegido para ocupar cualquier cargo de elección popular. Para ello se debe de cumplir también con los requisitos de edad, nacionalidad y vecindad del lugar. Sobre la edad mínima que exigen las disposiciones constitucionales para ocupar cargos de elección popular se señalan los siguientes: Presidente de la República, 35 años; Senador, 25 años; Diputados Federales, 21 años; Gobernador del Estado, 30 años; y, Diputados Locales y Presidentes Municipales 18 años, todos se refieren a años cumplidos al día de la elección.

El voto en sus dos perspectivas es sin lugar a dudas una de las conquistas más importantes alcanzadas a través de la historia, ya que por medio de él, los ciudadanos sin distinción de raza, sexo, religión, situación económica, nivel cultural, intervienen con sus decisiones en la vida pública del país. Frente a estos derechos encontramos las obligaciones que son todas aquellas actividades, que el ciudadano está obligado a realizar, dentro de éstas, el artículo 36 de la
Constitución Política del país establece como obligaciones del ciudadano de la república: 1.- Votar en las elecciones populares en los términos que señale la ley; 2.- Desempeñar los cargos de elección popular de la Federación o de los Estados; y, 3.- Desempeñar los cargos concejiles del

Municipio donde resida, las funciones electorales.

El artículo 16 de la Constitución Política Local establece básicamente las mismas obligaciones para los ciudadanos del Estado, pero aquí se deben resaltar tres puntos: 1.- Votar en las elecciones estatales y municipales, plebiscitos y referendos. 2.- Inscribirse en el Padrón Estatal

Electoral y 3.- Desempeñar las funciones electorales para las que hubieren sido designados.

Es necesario destacar el planteamiento del voto como un derecho y como una obligación; esta dualidad está del todo justificada en razón de la importancia del voto como acto ciudadano libre y legitimador de la democracia. En este mismo sentido es digno de resaltar que la Constitución

Local da impulso a nuevas formas de participación ciudadana, como son el plebiscito y el referendo, mecanismos de democracia semidirecta que permiten participar a la ciudadanía en la consulta de decisiones o medidas administrativas relacionadas con el progreso, bienestar e interés social en el Estado, o bien para participar en la aprobación, reforma y abolición de las leyes y decretos del Congreso del Estado.

Sobre la obligación de desempeñar las funciones electorales para las que hubieren sido designados, es un punto importante y sobre el cual descansa gran parte de la organización de un proceso electoral o procedimiento de plebiscito o referendo. Esta participación de los ciudadanos como funcionarios de casilla o de mesas directivas de consulta en su caso, se establece en el Código Electoral para el Estado de Veracruz-Llave.

La participación de la ciudadanía en tareas de funcionarios de casilla es importante como elemento de transparencia, pero sobre todo, como factor de acercamiento de los ciudadanos con las instituciones en el marco de la educación cívica y la cultura democrática. Otra forma de participación es la observación electoral, en ella los ciudadanos participan como observadores de los actos de preparación y desarrollo de los procesos electorales y procedimientos de plebiscito y referendo, así como de los que se lleven a cabo el día de la jornada electoral o de consulta, en la forma y términos que determine el Consejo General del Instituto Electoral Veracruzano.

Podemos concluir que a los jóvenes, alcanzar la ciudadanía les permite participar de diversas formas en la vida democrática del país, ello les significa el derecho al voto y a emitir su opinión en plebiscitos y referendos, la libre militancia en partidos políticos y la libertad de expresión, de reunión y manifestación, a ello agregamos la participación del ciudadano como funcionario de casilla o como observador electoral. En este sentido estamos convencidos que las nuevas generaciones harán suyas las formas de participación como el plebiscito y el referendo, pues nacen con ellas y será práctica común entre los gobernantes la consulta a la ciudadanía como un procedimiento para la toma de decisiones o medidas administrativas o la reforma, aprobación o abolición de leyes.

Una de las preguntas más frecuentes en relación con este tema es ¿qué debe ser primero, las reglas y las instituciones o las prácticas y la formación de ciudadanos? Puede tratarse de un falso dilema, sin embargo, no deja de provocar a la discusión de un problema real. En todo proceso político hay aprendizajes que modifican la forma en que las nuevas generaciones de ciudadanos se enfrentan y participan en el espacio público. La democracia electoral y la confianza en sus instituciones es resultado de un largo proceso en donde los actores políticos y la ciudadanía han empeñado sus deseos en empujar el desarrollo de los organismos electorales. Instituciones y ciudadanos no han estado desvinculados, muchas veces han actuado de forma coordinada. ello ha derivado no sólo en una mejoría en las reglas y la institucionalidad de los procesos electorales, sino también, en una ciudadanía suficientemente articulada e informada, alejada de la indiferencia y la apatía, ejemplo para los nuevos ciudadanos.

De igual manera, una democracia representativa no puede ser eficiente con tan sólo estos elementos, debe crear instituciones independientes que cumplan estas funciones. En este ámbito de competencia el Instituto Electoral Veracru-zano, organismo autónomo de Estado, participa activamente con la ciudadanía actual y con los jóvenes desde luego, promoviendo estos valores y creando espacios de participación que garanticen la representación plural y transparente de la sociedad veracruzana.

Lo que se necesita para ser presidente

"No basta con ser mayor de edad y tener la nacionalidad española; hace falta algo más para ser presidente". Lo dijo Mariano Rajoy, después de su bochornosa actuación en el debate parlamentario en el que se discutió sobre lo indiscutible: por qué se había roto el alto el fuego (como si el Gobierno, y no ETA, tuviera algo que decir al respecto). La pretensión de Rajoy era descalificar, una vez más, al presidente del Gobierno: un añadido a sus continuas acusaciones de que el presidente "es un ignorante", "un bobo", "un cándido" o un "soñador", por utilizar solamente algunos de los más suaves improperios que el líder de la oposición le brinda habitualmente. A pesar de ello, la pregunta implícita en la afirmación de Rajoy es buena: ¿qué se necesita tener para ser presidente? Y como fue Rajoy el que hizo la afirmación, también parece legítimo rebotarle a él la pregunta: señor Rajoy, ¿tiene usted lo que se necesita para ser presidente?

Hay dos versiones sobre lo que "se necesita" para ser presidente. Una dice que el presidente (los políticos en general) han de ser personas normales, con las mismas características y cualidades que tiene el común de los mortales, a los que piden el voto y a los que, en su caso, representan. Otra, más elitista, dice que el presidente (los políticos en general) tienen que tener unas cualidades especiales que les diferencien del resto de los ciudadanos, tales como el aguante, la capacidad de liderazgo, la visión, la ambición de poder en el buen sentido de la palabra, etcétera.

Es evidente que Mariano Rajoy, al decir "se necesita algo más que ser mayor de edad y tener la nacionalidad española para ser presidente", apuesta por la segunda visión y no por la primera. Nada que reprocharle: a menudo se cita al actual presidente de Estados Unidos, George W. Bush, como el ejemplo del "hombre medio" norteamericano, y miren a lo que esta mediocridad nos ha llevado. Dios (o su equivalente laico) nos libre pues de los hombres que "conectan" y "entienden" al pueblo porque "en realidad son como el pueblo". La historia nos ha regalado muchos de éstos, con, casi siempre, funestas consecuencias.

El punto de partida de Rajoy es pues asumible. Pero la pregunta es: ¿se ajusta él mismo a este tipo de versión de lo que debe ser un líder político?
De todas las características que he mencionado antes, quizá el liderazgo es la que mejor define a este tipo de forma de ver y entender a los políticos. ¿Qué es el liderazgo? Como mínimo, es la capacidad de diseñar estrategias que te aúpen al poder, y luego, de imponerlas sobre tu partido y sobre los grupos y personas que en principio te apoyan para conseguir tus objetivos. Ésta es una definición mínima, que no asume ninguna cualidad taumatúrgica ni mística en el líder (si hiciera esta asunción, Rajoy tendría problemas). Pero que Dios (o su equivalente laico) nos libre, también, de los visionarios, que de ellos llenos está el mundo, también con consecuencias desastrosas.

La estrategia que ha diseñado Mariano Rajoy para auparse al poder y desbancar a Zapatero está hoy en día aproximadamente clara. En una primera fase (digamos, los dos o tres primeros años de la legislatura) se trataba de ganar la moral perdida por la derrota del 14-M, y de conseguir que los fieles del PP siguieran apoyando al partido. Esto se conseguiría endureciendo el discurso y exacerbando, hasta el límite de lo imposible, la crítica al Gobierno. Ello incluía centrar el fuego en la figura de su presidente: siendo el líder más valorado de la política española, las continuas descalificaciones hacia su persona, incluso aunque fueran exageradas, irían, día a día, haciendo mella en su imagen. Al mismo tiempo que ésta se desmoronaba, los votantes tradicionales del PP irían recobrando el entusiasmo y cerrando filas en torno a su líder.
En una segunda fase (digamos, desde el tercer año de la legislatura), Rajoy, una vez conseguido el objetivo de mantener su suelo electoral, iría moderando su discurso, con el fin de atraerse al famoso centro, es decir, a todo aquel conjunto de personas, de talante moderado, que priman en un líder político y en un partido cosas como la eficacia, la serenidad, la seriedad, el buen hacer, y sin las cuales es muy difícil ganar unas elecciones.

El punto de inflexión, el momento en el que se produjo ese "rolo de viento" está, además, perfectamente claro: fue la aprobación del estatuto andaluz en el Congreso, con los votos del PSOE y del PP (amén del de otras formaciones políticas). Ésa fue la señal que "el líder" Rajoy dio a sus acólitos para que empezaran a moderar su discurso, para que empezaran a ganarse a los más moderados de entre los electores a través de la propia moderación del partido.
A partir de ahí, la historia es bien conocida: ETA decide romper su alto el fuego poniendo una bomba en la T-4. Mueren dos personas. Estas dos personas son inmigrantes. Se convocan manifestaciones en repulsa del atentado. Todos salen a la calle, menos el PP. Rajoy pide explicaciones al presidente en el Congreso. Zapatero las da. Rajoy le dice que "si hay bombas es porque usted no ha cedido, y si no las hubiera, sería porque lo ha hecho". La ruptura es total. Y todos los esfuerzos realizados hasta el momento para dar a entender que el PP se estaba moderando, caen hechos pedazos.

Rajoy ha sido incapaz de ejercer su liderazgo dentro del partido, es decir, de seguir con la estrategia de moderación que, tras los primeros años de legislatura, se había marcado. Las pasiones y las tensiones internas del partido, la necesidad de "sangre" que todavía impera en su seno después del "robo del 14-M a manos del PSOE", los cantos de sirena que incitaban al líder a estrellarse contra las rocas, todo ello ha podido mucho más que cualquier intento de racionalidad, que cualquier intento por atarse al curso de acción originalmente diseñado.

Visto lo visto, ¿tiene pues Rajoy ese "algo más" que el propio Rajoy entiende que se necesita para ser presidente? Es legítimo dudarlo.

Hay dos versiones sobre lo que "se necesita" para ser presidente. Una dice que el presidente (los políticos en general) han de ser personas normales, con las mismas características y cualidades que tiene el común de los mortales, a los que piden el voto y a los que, en su caso, representan.

Otra, más elitista, dice que el presidente (los políticos en general) tienen que tener unas cualidades especiales que les diferencien del resto de los ciudadanos, tales como el aguante, la capacidad de liderazgo, la visión, la ambición de poder en el buen sentido de la palabra, etcétera.

Es evidente que Mariano Rajoy, al decir "se necesita algo más que ser mayor de edad y tener la nacionalidad española para ser presidente", apuesta por la segunda visión y no por la primera.

Nada que reprocharle: a menudo se cita al actual presidente de Estados Unidos, George W. Bush, como el ejemplo del "hombre medio" norteamericano, y miren a lo que esta mediocridad nos ha llevado. Dios (o su equivalente laico) nos libre pues de los hombres que "conectan" y "entienden" al pueblo porque "en realidad son como el pueblo". La historia nos ha regalado muchos de éstos, con, casi siempre, funestas consecuencias.

El punto de partida de Rajoy es pues asumible. Pero la pregunta es: ¿se ajusta él mismo a este tipo de versión de lo que debe ser un líder político?

De todas las características que he mencionado antes, quizá el liderazgo es la que mejor define a este tipo de forma de ver y entender a los políticos. ¿Qué es el liderazgo? Como mínimo, es la capacidad de diseñar estrategias que te aúpen al poder, y luego, de imponerlas sobre tu partido y sobre los grupos y personas que en principio te apoyan para conseguir tus objetivos. Ésta es una definición mínima, que no asume ninguna cualidad taumatúrgica ni mística en el líder (si hiciera esta asunción, Rajoy tendría problemas). Pero que Dios (o su equivalente laico) nos libre, también, de los visionarios, que de ellos llenos está el mundo, también con consecuencias desastrosas.

La estrategia que ha diseñado Mariano Rajoy para auparse al poder y desbancar a Zapatero está hoy en día aproximadamente clara. En una primera fase (digamos, los dos o tres primeros años de la legislatura) se trataba de ganar la moral perdida por la derrota del 14-M, y de conseguir que los fieles del PP siguieran apoyando al partido. Esto se conseguiría endureciendo el discurso y exacerbando, hasta el límite de lo imposible, la crítica al Gobierno. Ello incluía centrar el fuego en la figura de su presidente: siendo el líder más valorado de la política española, las continuas descalificaciones hacia su persona, incluso aunque fueran exageradas, irían, día a día, haciendo mella en su imagen. Al mismo tiempo que ésta se desmoronaba, los votantes tradicionales del PP irían recobrando el entusiasmo y cerrando filas en torno a su líder.

En una segunda fase (digamos, desde el tercer año de la legislatura), Rajoy, una vez conseguido el objetivo de mantener su suelo electoral, iría moderando su discurso, con el fin de atraerse al famoso centro, es decir, a todo aquel conjunto de personas, de talante moderado, que priman en un líder político y en un partido cosas como la eficacia, la serenidad, la seriedad, el buen hacer, y sin las cuales es muy difícil ganar unas elecciones.

El punto de inflexión, el momento en el que se produjo ese "rolo de viento" está, además, perfectamente claro: fue la aprobación del estatuto andaluz en el Congreso, con los votos del PSOE y del PP (amén del de otras formaciones políticas). Ésa fue la señal que "el líder" Rajoy dio a sus acólitos para que empezaran a moderar su discurso, para que empezaran a ganarse a los más moderados de entre los electores a través de la propia moderación del partido.

A partir de ahí, la historia es bien conocida: ETA decide romper su alto el fuego poniendo una bomba en la T-4. Mueren dos personas. Estas dos personas son inmigrantes. Se convocan manifestaciones en repulsa del atentado. Todos salen a la calle, menos el PP. Rajoy pide explicaciones al presidente en el Congreso. Zapatero las da. Rajoy le dice que "si hay bombas es porque usted no ha cedido, y si no las hubiera, sería porque lo ha hecho". La ruptura es total. Y todos los esfuerzos realizados hasta el momento para dar a entender que el PP se estaba moderando, caen hechos pedazos.

Rajoy ha sido incapaz de ejercer su liderazgo dentro del partido, es decir, de seguir con la estrategia de moderación que, tras los primeros años de legislatura, se había marcado. Las pasiones y las tensiones internas del partido, la necesidad de "sangre" que todavía impera en su seno después del "robo del 14-M a manos del PSOE", los cantos de sirena que incitaban al líder a estrellarse contra las rocas, todo ello ha podido mucho más que cualquier intento de racionalidad, que cualquier intento por atarse al curso de acción originalmente diseñado.

Visto lo visto, ¿tiene pues Rajoy ese "algo más" que el propio Rajoy entiende que se necesita para ser presidente? Es legítimo dudarlo.